Blogia
soyquiensoy (Ricardo R. González)

Grietas en la tierra

Grietas en la tierra

Por Ricardo R. González

A las agobiantes problemáticas globales se arrastra, de año en año, la degradación de esa tierra sustento imprescindible de vida.

Cada 17 de junio está inscrito como el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, un fenómeno exacerbado por un cambio climático agresivo, pero también por acciones despiadadas de una parte de la humanidad que llaman a incentivar las buenas voluntades a fin de impedir holocaustos.

Sepa que este mundo nuestro suma más de mil 500 millones de personas dependientes de tierras en proceso de degradación, mientras el 42 % de los habitantes más pobres pasan su día a día sobre zonas ya heridas por las grietas. 

Precisamente la degradación de las tierras resulta suficiente para convertir a dichos sitios en los más inseguros del mundo, y según el ojo previsor de los expertos pudiera llegar a desestabilizar a regiones enteras.

Y aunque muchos dan la espalda y consideran estos temas entre los de menor trascendencia, conozca que en apenas seis años unos 60 millones de pobladores procederán a la emigración hacia porciones de África del Norte o Europa como consecuencia de la desertificación que desde hace años castiga la parte subsahariana.

Cuba tampoco escapa de estos males, y deviene uno de los problemas medioambientales de magnitud que sacude al archipiélago al agregar, además de conductas erróneas e irresponsables, el comportamiento irregular de las lluvias y la explotación indiscriminada del terreno.

¿Daños?, ilusos quienes lo duden. Que lo diga la pérdida de la productividad —biológica o económica— motivada por estas actuaciones irreverentes, por las situaciones naturales, o por la combinación de ambas.

Habrá, entonces, que intentar la mejoría y preservación de la biodiversidad y los ecosistemas a fin de favorecer los procedimientos ecológicos, y reducir vulnerabilidades que atenten contra la población, a tenor de que aquellos más vigorosos resultan los más resistentes a los peligros inducidos por las inestabilidades climáticas.

Desde 1994 está declarado el Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía. Otra jornada más para un calendario atiborrado de celebraciones.

Ahora bien, ¿qué resultados existen desde que fue consolidado el buen empeño hasta la fecha?, ¿en qué medida han cambiado las actitudes humanas para hablar de efectos positivos?

Nos parece que falta mucho camino por recorrer y tela por donde cortar. África despierta y se acuesta con idénticos problemas y diría que más agravados, en tanto, en otras partes del mundo la irracionalidad sigue dañando a escenarios insospechados y que no dejan de causar verdaderas sorpresas.

Así va el globo terráqueo. Herido y agravado en sus múltiples aristas y entornos naturales, ese que exhorta a convertir, cada 17 de Junio, en un espacio prolongado y sin límites, en verdaderas motivaciones que compulsen a que los seres humanos piensen en los que están por venir, y en lo mucho que se puede hacer a favor de la sostenibilidad de este universo nuestro, pero con plena conciencia, sin ataduras ni descalabros.     

También puede ver este material en:

http://ricardosoy.wordpress.com

https://twitter.com/cibergonza

0 comentarios