Cuarto caso de infante villaclareño operado de retinopatía de la prematuridad en breve tiempo
Texto y fotos Ricardo R. González
El bajo peso al nacer unido a una menor edad gestacional para la llegada al mundo incrementa las posibilidades en el desarrollo de la retinopatía de la prematuridad (ROP) que ya registra cuatro casos en los últimos dos meses.
Einy Sarahí Martínez Rodríguez es la más reciente y nació el 22 de octubre con apenas 27 semanas de embarazo por parte de su mamá y solo 900 gramos de peso para resultar el más bajo registro al compararse con los infantes anteriores.
Su progenitora Liniuska Rodríguez Acosta, de 35 años, relata que su embarazo transcurrió normal, «al principio con nauseas, pero pueden presentarse al inicio de una gestación».
Estaba acostada cuando casi al amanecer de un sábado «rompió la fuente» e impuso el traslado al hospital universitario ginecobstétrico Mariana Grajales. Llegó a Cuidados Especiales y pasados tres días iniciaron las contracciones. No había tiempo que perder: la niña quería descubrir su mundo externo.
Para Liniuska resulta su segunda descendencia ya que su primogénito tiene 8 años y en aquella oportunidad tuvo pérdida de líquido, mas el nacimiento ocurrió a las 38 semanas ya a término.
La familia reside en la capital provincial y junto a Karel Martínez Freire, el padre de la criatura, comparten las manualidades del barro como trabajadores por cuenta propia.
DESDE EL SERVICIO PIEL A PIEL
Einy permanece en el servicio Piel a Piel donde fue intervenida y estará hasta que alcance el peso requerido para el egreso. De acuerdo con las valoraciones de la Dra. Olga María López Popa, al frente de la sección,
requirió, inicialmente, los cuidados intensivos neonatales, estuvo ventilándose de manera invasiva en los primeros días de vida e hizo todas las complicaciones esperadas por su inmadurez extrema.
«Un primer examen para determinar la ROP no arrojo nada significativo; sin embargo, en una segunda prueba se detecta una hemorragia bilateral en los ojos y fue necesario intervenirla», argumenta la especialista en Neonatología.
Y agrega que «de los casos anteriores —para resultar este el de más bajo peso— es el que mejor evolución clínica ha tenido luego de intervenida, en tanto ha ganado peso de manera considerable al alcanzar los 1600 gramos, por lo que puede considerarse un verdadero logro».
La visita periodística coincide con el pase de vista de la Dra. C. Zoila Fariñas Falcón, al frente del programa de ROP en Villa Clara, y de la también oftalmóloga del propio hospital Yarmis Abréu Cárdenas.
Fariñas Falcón considera que a los 12 días de intervenida la recién nacida presenta una evolución satisfactoria, aunque habrá que esperar el efecto del medicamento que puede tardar de cuatro a seis semanas.
«La etapa aguda —dijo— ya mejoró, y continuaremos el seguimiento establecido para determinar conductas a seguir en caso que lo requiera».
El padecimiento en los infantes ocurre en el período neonatal y no se nace con ella. cta gracias al programa destinado a la prevención de la ROP ejecutado en todas las salas de cuidados intensivos neonatales a recién nacidos con bajo peso, pretérminos, ante embarazos en la adolescencia, en edades extremas por parte de las madres, gestaciones múltiples o enfermedades crónicas no trasmisibles.
Existen varios grados de ROP desde el I al V. Los primeros son leves y regresan sin dejar secuelas, pero el grado III se considera en fase activa y ya advierte la aplicación de tratamientos, el IV indica desprendimiento parcial de la retina, y el V implica ceguera total.
Vale señalar que en Cuba de cada 100 niños que nacen 16 pueden desarrollar la ROP. Gracias a un programa materno infantil consolidado y a las unidades de terapia intensiva neonatal se evitan desenlaces fatales en un mundo que tiene un alza aproximada de 15000 prematuros anuales.
PIE DE FOTOS
1.- Liniuska no pierde de vista cada detalle de su pequeña que ya da muestra de intranquilidad y de preferir la lactancia materna.
2.- La Dra. Olga María López Popa, al frente del servicio Piel a Piel en el ginecobstétrico Mariana Grajales, precisa que resultó muy breve el tiempo de intervención con sedación local en un proceder que transcurrió sin complicaciones.
3.- La Dra.C Zoila Fariñas Falcón (a la izquierda) y Yarmis Abréu Cárdenas, especialista en Oftalmología del Materno villaclareño, realizan pase de visita a la pequeña para constatar su evolución, algo que preocupa ante tantos nacimientos portadores de ROP en tan poco tiempo.
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