La ciencia tiene su propia brújula
El potencial villaclareño regala al país la fiesta grande por el Día de la Ciencia Cubana. Un quehacer interminable en bien de la existencia.
Por Ricardo R. González
Fotos: Ramón Barreras Valdés y del autor
Habrá un brindis por la vida gracias a los hombres y mujeres de pensamiento. Todo ocurrirá este 15 de Enero cuando Villa Clara resulte, por quinta ocasión, la anfitriona de las festividades dedicadas al Día de la Ciencia Cubana en tiempos que reclaman empinarse para tratar de vencer un camino no exento de obstáculos.
Que lo digan esos estudiosos que pasaron noches y madrugadas tratando de cerrar una investigación, y ya casi concluida han tenido que partir de cero debido a contratiempos aparecidos. O los esfuerzos de los innovadores en busca de acertadas soluciones, y qué decir de la dedicación del Centro de Información y Gestión Tecnológica (Ciget), tantas veces Vanguardia Nacional, en el empeño de informatizar la sociedad, sin abandonar el incremento de los servicios dirigidos al sector no estatal.
En tiempos marcados por la necesaria competitividad le corresponde a la Oficina Territorial de Normalización (OTN) la misión de contribuir al mejoramiento cualitativo de la producción y los servicios siguiendo los complejos pasos exigidos por las normas de calidad, normalización, y la metrología, a lo que se suma la inocuidad de los alimentos como coordinadora de todas las actividades regulatorias existentes en Cuba respecto al tema.
Desde otra ventana, el Centro de Estudios y Servicios Ambientales (Cesam) se consolida con sus amplios perfiles destinados a la conservación de recursos naturales, al manejo integral de ecosistemas frágiles, sin descartar el enfrentamiento y la mitigación al cambio climático (CC).
] La siembra de cultivos entrecruzados y, sobre todo de ciclo corto, constituye excelente estrategia para el logro de resultados dirigidos a la producción de alimentos.[/caption]
Y tampoco pueden obviarse las acciones de la Unidad de Regulación y Seguridad Ambiental, de la Delegación Provincial del Citma, en el necesario rol de fiscalizar el cumplimiento de las disposiciones y normas jurídicas vigentes en materia de protección del medio ambiente con la adopción de las medidas pertinentes.
Con espacio ganado aparece el Centro Meteorológico Provincial avalado por sus reconocimientos nacionales en la precisión de los pronósticos y en investigaciones diversas a partir de la profesionalidad de sus especialistas. A su accionar se inserta la Estación Agrometeorológica del Yabú que fuera seleccionada la mejor de su tipo entre las 68 existentes en el país durante 2018.
Valiosos distintivos, además, para los observadores meteorológicos y el Grupo de Instrumentos y Métodos de Observación (GIMO) de Villa Clara que también lidera en Cuba en la supervisión de los múltiples elementos a tener en cuenta por los expertos para el estudio del tiempo.
Y no puede faltar la contribución de la ANIR y de las Brigadas Técnicas Juveniles (BTJ) que desde una óptica fresca apoyan también el necesario desarrollo
MÁS ALLÁ DE LOS CLONES
En el arduo sendero científico e innovador la provincia no ha dado la espalda a prioridades dirigidas a la producción de alimentos, la energía, las ciencias sociales y humanísticas, unidas al aporte a la salud, la informatización y automatización, el cuidado del medio ambiente y la calidad de vida.
Una verdadera universidad investigativa y docente la constituye el Instituto Nacional de Investigaciones en Viandas Tropicales (INIVIT) con su tradicional apoyo a la producción de viandas y hortalizas que se ha revitalizado a través del tiempo.
Para los científicos radicados en esta porción dominicana no se trata solo de aportar nuevos clones, por ello insisten en la introducción de variedades de altos rendimientos resistentes a los cambios climáticos en el boniato, la yuca, la malanga y el pepino, pero también con tecnologías adecuadas en el manejo integral de plagas en estos cultivares.
Los programas aplicados a la Salud también disponen de un alto componente científico.
Sin lugar a dudas la integración de la Universidad Central «Marta Abreu» de Las Villas al sistema de ciencia ha sido otras de las fortalezas bien aprovechadas en la provincia. Ahí están los resultados dirigidos a las construcciones con avales en el país y foráneos; sin embargo, sientan cátedra el Instituto de Biotecnología de las Plantas (IBP) en el programa de granos y en la producción de semillas biotecnológicas de plátanos y bananos vinculados con el sistema de biofábricas de la Agricultura y las empresas agropecuarias ubicadas en distintos territorios.
Muchos de sus investigadores y obreros ya dominan hasta el lenguaje de esas plantas, descubren sus comportamientos y misterios con el prisma de que no todo escapa de los sinsabores.
El CBQ, indispensable institución cuando se hable de ciencia villaclareña.[/caption]
Un pilar importante lo constituye la reanimación de la red de laboratorios del país al introducirse tecnologías de propagación que implican hacer ciencia más cerca del pueblo.
A su colectivo también le compete la búsqueda de variedades resistentes al estrés por intensas sequías y altas temperaturas que han sido probadas fuera de época, sin dejar de tender las pupilas hacia el mercado internacional que ofrece resultados en las exportaciones y en otros órdenes.
Un Centro de Reproducción de Entomófagos y Entomopatógenos (CREE) es otra de las modalidades del arsenal científico como laboratorio encargado de producir agentes de control biológico destinados a combatir plagas y enfermedades en los cultivos. Encrucijada cuenta con el mejor de su tipo en el país.[/caption]
Si de laboriosidad se trata habrá que contar con el Centro de Bioactivos Químicos (CBQ) donde las neuronas siempre muestran la inquietud propia de los buenos científicos.
No hay rama importante en la vida cubana que escape de sus proyectos. Así aparecen aditivos con múltiples ventajas para las labores constructivas, diversos productos destinados a incrementar los rendimientos agrícolas, y otros que intervienen en la salud humana, vegetal y animal en una institución que no descuida sus planes de exportación y todo lo inherente a la sustitución de importaciones.
La dependencia agrega los estudios toxicológicos de productos químicos con las valoraciones de la toxicidad aguda en ratas, la irritabilidad dérmica y oftálmica en conejos, y los servicios analíticos de la calidad del agua, entre otros colectivos universitarios que también tributan al progreso.
No todo son loas. La ciencia villaclareña sabe de lunares tanto por condiciones objetivas como subjetivas, sobre todo en la eliminación de fuentes contaminantes, en la proliferación de las innovaciones, y la actualización de las licencias ambientales, mas los aportes sobresalen ante las deficiencias. Durante la etapa se apoyó la economía y la sociedad con la aplicación de resultados científicos y tecnológicos en los polos productivos de Quemado de Güines, Santo Domingo y el Valle del Yabú.
También se dedicó espacio a las fuentes renovables de energía, al universo farmacéutico, biotecnológico y de elaboraciones médicas, así como a la introducción de nuevas tecnologías en el mundo de las construcciones, la industria ligera, las telecomunicaciones, y en lo concerniente a la información y la conectividad.
Todo ello subraya los resultados en aras de compartir el conocimiento a partir de una estrategia integrada de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente que aglutina a múltiples actores. El convite se acerca, y de lo que no hay dudas es que el accionar científico villaclareño tiene su propia brújula que marca vitales direcciones.
Desde la OTN se le aporta al desarrollo social y su colectivo sienta cátedra dentro de las instituciones científicas.[/caption]
MEMORÁNDUM
— Quince entidades del sector empresarial villaclareño despidieron 2019 con la certificación en la gestión ambiental, en tanto 50 lograron el distintivo en base a la calidad.
— El territorio concluyó nueve estudios de Peligro, Vulnerabilidad y Riesgos (PVR), y sobresale en la implementación del Plan de Estado para el Enfrentamiento al Cambio Climático (Tarea Vida) mediante 11 tareas previstas a corto, mediano y largo plazo.
— La atmósfera dejó de recibir más de 40 000 t de CO2 al evitarse el consumo de 28 845 t de combustible convencional por el empleo de la biomasa cañera que aportó 6 002 MWh al Sistema Electroenergético Nacional.
— Entre los objetivos seguidos por el potencial científico aparecen el rescate y conservación de la Memoria Histórica y Documental, sin restar importancia a la protección de la biodiversidad, por citar algunos.
CONTRASTES
Con la despedida del pasado año concluyeron diez años de temperaturas marcadas por el calor acompañadas de subidas del nivel del mar sin precedentes, y de retroceso en los glaciares, entre otras anomalías.
Ahora, por solicitud de los científicos y acorde con las realidades existentes en el mundo, se ha declarado el período 2019-2020 en emergencia climática, lo que augura la entrada en una década crítica.
Pero las sorpresas siguen apareciendo y un estudio publicado en el diario español El País asevera que la exposición diaria a las partículas contaminantes está estrechamente vinculada con el riesgo de sufrir osteoporosis o disminución de la densidad de los huesos. Y como si todo fuera poco la contaminación pudiera fomentar la diabetes y el alzhéimer.
Hay mucho más; sin embargo, en medio de estas realidades, que no son exclusivas de ultramar, también trabaja la comunidad científica cubana —y villaclareña— que asume enormes retos para enfrentar los desafíos de la vida, aunque impliquen sacrificios mayores.
¿Tenemos o no nuestras Razones?
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