Miradas hacia el Centro Universitario de Caibarién
Por Ricardo R. González
Fotos del autor e internet
Quizás resulte el Centro Universitario Municipal (CUM) con las características más peculiares entre los existentes en Cuba. Radica en el territorio de menor cantidad de habitantes en Villa Clara y el segundo más pequeño del país. Sume a ello que el 50 % de sus pobladores labora en la cayería del noreste, situada, exactamente, a 50 km de la cabecera territorial.
Un residente en la localidad remediana de Zulueta llegó hace más de una década a la Villa Blanca, y así Wilian Marín Hernández asume hoy la subdirección de este CUM multifacético.
Y entre esas particularidades figura la de no olvidar a ese personal que labora en la rama turística y necesita de los aportes científicos y las tecnologías para impulsarla, por lo que la Universidad tiene que llegar hasta ellos.
«No es solo esa singularidad, si tenemos en cuenta que el territorio dispone de la única empresa directa de inversión extranjera con la confitería Proxcor, poseedora de ciudadanos extranjeros al frente y que deben entender la aplicación de la ciencia y la tecnología».
Si seguimos recorriendo la geografía del municipio hay que detenerse en su industria pesquera. «Una parte del colectivo labora directamente en el mar, por lo que la capacitación de ese personal no oculta complejidades; sin embargo, la Universidad tramita las posibilidades a fin de que el arsenal científico—tecnológico llegue a ellos», señala Wilian Marín.
— ¿Qué hace el CUM para que la ciencia y la innovación lleguen a esas entidades?
— Una tesis de maestría dio lugar a la estrategia municipal de superación de directivos, y lo primero que se hizo fue aplicarla desde el inicio. Se elaboró un plan de acción con las particularidades de cada entidad implícito del ajuste a la capacitación para el personal.
Tenemos, además, un profesor, a tiempo completo, destinado a atender la Asamblea del Poder Popular en sus funciones, y en lo particular soy miembro del Consejo de la Administración Municipal (CAM) y participo en las tomas de decisiones más importantes en el mundo económico.
— ¿Puede hablarse de fortalezas en el CUM?
— Más del 50 % del claustro tiene categoría superior (asistentes, auxiliares o titulares y solo seis instructores) con una permanencia de años que permite dominar el contenido a partir de la visión y misión de lo que necesita el municipio.
— Y la contraparte ¿debilidades?
— Las tecnologías de computación resultan deficitarias, nuestro laboratorio está muy deprimido, en tanto no tenemos, hasta próxima fecha, un local propio, por lo que permanecemos en otra institución compartiendo el espacio junto a otras enseñanzas.
La Asamblea Municipal trabaja en la asignación del espacio que ya se encuentra en proceso de transformación. Debe entrar en funcionamiento el 1o. de septiembre y logrará mayor control docente, estabilidad y eficiencia.
— ¿Se arrastra el injustificable problema de las investigaciones engavetadas?
— La aplicación de los descubrimientos de la ciencia en otras instituciones no han derivado plena satisfacción. Las tesis se hacen a partir de los bancos de problemas de las entidades, pero muchas se engavetan sin aplicarlas, ya sea por cuestiones económicas, de dirección, burocratismos, en fin.
Hay trabajos que beneficiarían la calidad del servicio en el Turismo y no llevan gran inversión económica al insistir en los procesos. Otras son destinadas a contrarrestar la contaminación de la bahía y tampoco se han aplicado en su totalidad, y es muy lamentable al ser resultados de la investigación científica.
— ¿Retos actuales?
— Al cambiar el entorno hay que adaptarse. Las formas económicas privadas ocupan un lugar importante y debemos verlas como empresas que necesitan el acompañamiento en los diferentes formatos a fin de que logren un negocio más eficiente y creen más empleos, si se toma en cuenta que Caibarién sobresale en mipymes en el país y puedan aplicar un gobierno con ciencia, tecnología e innovación.
— ¿Incluir y no excluir?
— Hace tiempo se eliminó la exclusión del universo universitario en la totalidad de los procesos, desde el pregrado hasta los postgrados que en estos últimos interviene el CUM para aplicarlos de manera eficiente.
Wilian Marín Hernández es licenciado en Filosofía Marxista e Historia. Imparte las asignaturas de Historia de Cuba y Economía Política. En busca de su carta de presentación alude ser: «un filósofo que mira la sociedad con una visión para tratar de aplicar el marxismo en la actualidad cubana».
PIE DE FOTOS
1.- Hace más de una década Wilian Marín llegó a Caibarién y en la actualidad asume la subdirección del CUM. Es partidario total de la necesidad de aplicar ciencia e innovación en cada proceso.
2.- Gran parte del colectivo de la industria pesquera de la Villa Blanca labora directamente en el mar, por lo que la capacitación de ese segmento poblacional debe garantizarse.
3.- El profesor en el ejercicio docente en el CUM.
4.- Garantizar un óptimo servicio en la rama turística demanda acompañamiento sistemático.
También puede ver este material en:
0 comentarios