El azul de un gas prometedor
Ángel Narciso Rodríguez Quintana en los momentos en que manipulaba la válvula para obtener beneficios de una fuente renovable de energía que reduce la carga contaminante entre un 80 y 85 %.
Por resultar una de las provincias insignias en el empleo del biogás, Villa Clara recibirá, a mediados de abril, a los participantes en el Encuentro Nacional para compartir las vivencias en el uso de esta fuente renovable de energía
Por Ricardo R. González
Fotos: Ramón Barreras Valdés
Una llama intensa aparece en la cocina de Ángel Narciso Rodríguez Quintana, ese hombre devenido especie de enciclopedia viviente que reside en las proximidades de la Presa Hanabanilla entre palmas reales, majaguas, mangos, aguacates, chirimoyas, guanábanas, y quién sabe cuántas variedades le faltan aún por descubrir.
Allí repasa sus más de ocho décadas de vida. Conoce todos los secretos del embalse, y defiende ese paraíso natural al que une, desde hace cerca de veinte años, un dispositivo raro —para aquellos momentos iniciales de construcción— cuando muchos lo tildaron de loco, y pocos sabían de las bondades de un biogás.
Esa «divina locura» surgió gracias a la visita conjunta de un alemán y el doctor José Antonio Guardado Chacón, miembro de la junta directiva de la Sociedad Cubana dedicada a la promoción de las fuentes renovables de energía y el respeto ambiental (CUBASOLAR).
Ahora El Papa, como se conoce en la zona al vital «joven» próximo a cumplir 85 años, confiesa que al principio hubo su rechazo. El foráneo tenía reservas, y, de primer momento, manifestó su negativa.
Por entonces Rodríguez Quintana poseía en el patio una nave destinada a la crianza de carneros, y en uno de los encuentros el alemán le preguntó cómo vencía el dilema de buscar comida para los animales y liquidar 30 q de excremento. El Papa, ni corto ni perezoso, hizo su relatoría, y al constatar las circunstancias aprobó la instalación que comenzó a edificarse el 17 de noviembre de 1994.
Ambos visitantes orientaron la manera de convertir sueños en realidades. Pasaron los meses, y con esa memoria prodigiosa, el veterano recuerda que a la 1:00 de la tarde del 29 de diciembre de 1994 llegaba el toque final. La obra ponía su proa al futuro.
CON APUROS Y PACIENCIA
No todo se logró a pedir de boca ni faltaron los contratiempos, pero una satisfacción interna invadió a este hombre quien, a la par que su hijo Ángelillo, tienen múltiples historias que contar.
«Después, tanto Guardado como el alemán, visitaron varias veces el biogás. El extranjero me decía: «es el mejor del mundo». Incluso venía con su familia, y los hijos encontraban delicioso el olor desprendido desde una válvula que, en verdad, resulta pestilente».
Con el tiempo aquellos carneros fueron sustituidos por 35 cerdos, los que reciben atención desde bien temprano, pues un día en la vida de Ángel asoma con el cantío de los gallos y las encomiendas impuestas por la limpieza de su cochiquera.
«El biogás posee un mezclador. De ahí las excretas pasan al desarenador, y con una simple operación la mezcla se traslada al digestor con capacidad de 12 m3;, de ellos 4 m3 de gas metano. Luego aguarda la compensación, a fin de lograr un equilibrio y evitar que el gas escape, hasta finalizar en el gasómetro (3,6 m3 de gas metano) donde queda listo para emplearse en la cocción de alimentos».
La residencia está electrificada, pero bien pudiera utilizarse como fuente de energía, y no se descarta la idea de instalar cuatro lámparas (una en la vivienda y tres en los corrales) alimentadas con las posibilidades de la fuente como contribuyente al ahorro en la red.
Si de retenciones económicas se trata El Papa asevera que constituye algo extraordinario al evitar el uso de keroseno. «Estamos en fase de cálculos, mas puedo afirmar que se han ahorrado unas cuantas toneladas de luz brillante en estas dos décadas».
La inversión fue realizada por la Empresa Hidráulica, y entre sus componentes dispone de una trampa de agua reutilizable para suministrarla directamente en el tronco de las plantaciones, sin el empleo de fertilizantes, y despojadas de las heridas al entorno.
Cuando concluya el V Encuentro Nacional de usuarios del biogás, en el que Villa Clara será anfitriona, junto a Pinar del Río, como promotora de las experiencias a nivel nacional, este hombre cumplirá 64 años de trabajo; de ellos 21 como Vanguardia Nacional.
Nunca ha ingerido bebidas alcohólicas, ni ha fumado un cigarro por embullo. Ha salido muy poco de la Naturaleza prodigiosa que lo rodea, pues a su decir son cosas que no hacen falta, «sin embargo, la comida resulta vital».
Así sigue de domingo a domingo, con el precepto reiterado de que para ver las cosas «hay que estar sobre el terreno, sin bla, bla». Mientras tanto, su esposa y el resto de la familia también disfrutan de las bondades que propicia el intenso azul de un gas prometedor desde el interior de la cocina.
MEMORÁNDUM
— El biogás constituye una fuente renovable de energía que propicia gas a partir del metano y otros similares. Sus componentes dependen del tipo de biomasa utilizada, de las características y finalidades, así como de las particularidades del biodigestor.
— Sus usos más comunes están vinculados a la iluminación, y la refrigeración, al tiempo que no resulta descartable para cocinar, generar calor y energía eléctrica,
— La tecnología no rebasa lo complejo. Solo se necesita el biodigestor, capaz de producir el gas, la cámara que incorpora los residuos orgánicos (comida, restos de cosecha, estiércol…), a lo que se añade las bacterias anaeróbicas encargadas de degradar la materia para convertirla en metano.
— Entre sus principales ventajas figuran la reducción de los desperdicios sólidos, al tiempo que elimina ganes perjudiciales.
— Cada metro cúbico de biogás representa 6 000 kilocalorías, y comparado con otras fuentes, igual cantidad es equivalente a 6,8 kilovatios de electricidad, 0,6 metros cúbicos de gas natural, 0,8 litros de gasolina, 1,2 litros de alcohol combustible, 0,3 kilogramos de carbón, 0,71 litros de fueloil, y 1,5 kilogramos de madera.
— Según expertos del Grupo Cubano de Biogás (GB), la primera aplicación industrial que se recuerde en Cuba data de 1940, cuando se construyeron dos biodigestores para procesar los residuales de una fábrica de cervezas en La Habana.
CONTRASTES
Lea con detenimiento…El mundo actual emite unos 6 400 millones de toneladas de metano cada año, lo que representa un 15 % de las emisiones de los gases de efecto invernadero.
Si a ello se suma el hecho de que un conjunto de plantas de biogás restaría más de tres millones de toneladas de dióxido de carbono hacia la atmósfera, o el ahorro de, aproximadamente, 190.000 toneladas de petróleo, no hay dudas de la presencia de un recurso de notoria efectividad.
Muchos piensan que la modalidad se vincula a países signados por bajo desarrollo, y sepa que solo en Europa existen al menos 60 plantas de tratamiento de residuos orgánicos, en tanto la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) cataloga al biogás como «la gran oportunidad para potenciar la sustentabilidad de las actividades agropecuarias».
América Latina produce el 40% de los biocombustibles en el mundo por lo que la generalización de la modalidad bien pudiera convertirse en tema prioritario para toda la región y el Caribe debido a la alta volatilidad en los precios del petróleo, y la necesidad de los países de independizar su matriz energética.
Esta fuente de energía renovable depura residuales y reduce emisiones de gases dañinos a la gran atmósfera contaminada y hacia una capa de ozono que, desde hace años, pide clemencia.
¿Tenemos o no nuestras Razones?
También puede ver este material en:
0 comentarios