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soyquiensoy (Ricardo R. González)

Corazón contento

Corazón contento

Desde la apertura de la institución hasta cierre de julio pasado totalizan 6 mil 994 intervenciones con un 94,9 % de supervivencia. Se registran 732 pertenecientes a niños y una efectividad de 99,4 % en la edad pediátrica.

Por Ricardo R. González

Fotos: Carlos Rodríguez Torres y archivo personal del autor

La historia comenzó a fines de julio de 1986, exactamente el día 24, cuando Teresa Vera Valle, residente en Manicaragua, y Marta Rodríguez Pérez, con domicilio en Vueltas (Camajuaní), traspasaron el quirófano para decirle adiós a sus respectivas irregularidades cardíacas.

Ahora los recuerdos vuelan. Se adelantan o atrasan en el tiempo, y en este ir y venir el doctor Ignacio Fajardo Egozcue, especialista de II grado en anestesia y reanimación, y uno de los fundadores de la entidad, no oculta las tensiones compartidas en aquellos primeros casos.

Llegaba la hora cero. Había que demostrar lo aprendido en los adiestramientos recibidos en la capital cubana por quienes abrirían el largo camino.

Lo que se conoce poco es que las prácticas previas al enfrentamiento humano ocurrieron en una pequeña porción del otrora Hospital de Reposo de Santa Clara utilizándose animales de experimentación, pero con todo el equipamiento que llevaría el salón de operaciones.

Todo transcurrió de manera satisfactoria antes de asumir el gran reto. Luego de los casos de Teresa y Marta hubo un receso hasta octubre de aquel año a fin de precisar detalles y reorganizar determinados objetivos.

A partir de entonces no ha existido tregua voluntaria. Casi en el «debut» enfrentaron el primer paciente de urgencia. Un hombre, de 48 años, intervenido un año antes en La Habana. Descuidó la disciplina necesaria en su régimen de vida postoperatorio, y ello le provocó un coágulo en la aurícula izquierda que demandó otra intervención para extraerlo y sustituir la válvula dañada.

El proceso no tuvo contratiempos. Y en el primer noviembre en la vida del Cardiocentro, Yanet Millán Castillo inició en este centro el tratamiento quirúrgico en la infancia debido a una hiperplasia o estrechez en uno de los segmentos de la aorta que le ocasionaba algo curioso: Una hipertensión arterial en las extremidades superiores, mientras en las inferiores ocurría todo lo contrario.

Desde entonces la institución asume las acciones operatorias en mayores de tres años en adelante, pues las más complejas en la edad pediátrica son realizadas en el entorno habanero del «William Soler», especializado en estos procederes.

Otra prueba de fuego la evoca el doctor Fajardo con el también titular Orlando Marchena Moré, director administrativo del principal centro cardiovascular de la región central. Una portadora de un síndrome congénito en la aurícula derecha que requirió provocarle un paro circulatorio total a baja temperatura.

«Iniciamos con el empleo de la máquina de circulación extracorpórea (C.E.C) que remplaza las funciones cardiopulmonares durante el proceder quirúrgico), y en un momento determinado se hizo necesario bajar la temperatura humana por debajo de 20 grados centígrados. No había circulación sanguínea ni latidos. La persona quedó prácticamente muerta. Era impostergable llegar hasta la vena cava para trabajar sobre la anomalía, y este proceder no podía exceder los 45 minutos.

«Tratábamos de ganar en tiempo. Se logró, y al término reanudamos la circulación sanguínea por todo el cuerpo para devolverle a la persona su normalidad. Este paso conllevó unas dos horas con tal de llegar a los 37 grados centígrados. El proceso devino éxito».

EL TIEMPO…EL IMPLACABLE

Aquella criatura que vio la luz hace un lustro trazó sus propios horizontes. Todos sus avances guardan el denominador común de una labor en equipo sustentada desde el más prestigioso de los profesionales hasta el auxiliar como eslabón nada menospreciado.

Una trayectoria que apoya a otras especialidades tanto en servicios como en formación, y que en su trayectoria incluyó, en 1988, la cirugía de las coronarias que alcanza la cifra de 3 mil 474 a corazón latiendo, sin incluir las practicadas con el empleo de la C.E.C.

Por su parte el Laboratorio de Hemodinámica registra más de 9 mil 650 atendidos desde su apertura al enfrentar 10 y 12 casos diarios, y vale destacar las mil 849 angioplastias que gracias a sus métodos menos invasivos han evitado la asistencia al salón de sus beneficiados.

El Cardiocentro Ernesto Che Guevara es el único del país que combina la cirugía cardiaca con la vascular. Esta última opción rebasa ya las 300 cirugías cuyos saldos pueden compararse a los reportados en cualquier institución dedicada a la rama dentro del Primer Mundo.

La constitución del Complejo Multidisciplinario de Cirugía Cardiovascular, la apertura del Laboratorio de Electrofisiología, única dependencia de su tipo existente fuera de La Habana para el diagnóstico y tratamiento de las arritmias cardíacas, y contar con el Departamento de Tomografía Axial Computarizada (TAC), desde agosto de 2008, conforman las potencialidades de una unidad que brinda servicios a los residentes de Villa Clara hasta Camagüey.

Un detalle que tiene siempre presente el primer perfusionista que tuvo el centro y su director general desde los inicios, doctor Raúl Dueñas Fernández, descansa sobre los perfiles económicos en que resalta su contabilidad confiable y la evaluación nacional de satisfactoria durante el Control Interno.

Colectivo Moral, Vanguardia Nacional, Entidad de Ciencia e Innovación Tecnológica, y merecedor de la Orden Carlos J. Finlay, otorgada por el Consejo de Estado, y también compartida por sus prestigiosos doctores Álvaro Lagomasino Hidalgo y Francisco Javier Vázquez Roque figuran entre los distintivos.

Cada sueño posee también sus inconformidades. Por ello el incremento de las operaciones con casos del resto de las provincias conformantes de la red, el uso eficiente de los recursos y portadores energéticos, o la mayor atención al trabajador aparecen como aspectos a perfilar en busca de la satisfacción del paciente que merece por siempre un corazón contento.

MEMORÁNDUM

— Los antecedentes de la cirugía cardíaca en los predios se remontan a 1979 cuando el doctor Ismael Alejo Mena (ya fallecido) creó las bases para impulsar lo que a la postre sería el futuro Cardiocentro. Junto a los doctores José Cayón y Arturo Iturralde lograron unas 88 cirugías sin contar con las actuales técnicas sofisticadas.

— En el primer año de la institución (1986) se le habían asignado unas 20 intervenciones, pero su personal interiorizó que muchos pacientes aguardaban por solucionar sus contratiempos, y no se conformaron con el planeamiento cuantitativo. La cifra superó las 80.

— Hasta el pasado 31 de julio los beneficiados con la tomografía axial computarizada (TAC) ascendían a 4 mil 079, y otros 545 habían recibido las opciones del Laboratorio de Electrofisiología.

CONTRASTES

Una intervención cardiovascular demanda una inversión monetaria considerable en dependencia del rango de la institución ejecutora y del área geográfica donde esté ubicada.

Pero sepa que el uso de un solo estabilizador o dispositivo que fija el órgano cardíaco sin dejar de latir para facilitar el acto operatorio supera los mil dólares.

Estos resultan desechables; sin embargo, las propias condiciones económicas de Cuba y sus asfixias motivadas por el bloqueo conllevaron a la reutilización de los implementos sin que atente con la evolución del enfermo.

Luego de los procesos de esterilización y el cumplimiento de otras normas cada unidad de este tipo prolonga su utilidad de 30 a 40 oportunidades más, por lo que desde 2006 Cardiocentro le ha propiciado ahorros significativos al país al no tenerlos que solicitar.

Otro tanto ocurre con la cantidad de donaciones de sangre. Desde 2005 se redujo en más del 70 % el consumo de estas gracias al trabajo mancomunado del equipo.

Y todo… sin costarle un centavo al paciente.

¿Tenemos o no nuestras Razones?

1 comentario

Ricardo González -

Hace 25 años una institución de la Salud villaclareña comenzó su camino en bien del prójimo. No todo ha sido luz, mas el aporte de un trabajo en equipo permite que muchos residentes en la región central del país brinden por la esperanza