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Un beso por la vida

Un beso por la vida

Expertos del hospital pediátrico universitario José Luis Miranda, de Villa Clara, salvan a una recién nacida cuyo curso de su afección hubiera ocasionado consecuencias fatales o derivado hacia una incapacidad motora avanzada.

Por Ricardo R. González

Fotos del autor y cortesía Hospital Pediátrico

Mileidy Lahera Morales contaba los días para poder abrazar a su criatura en medio de un embarazo normal, mas en una de esas jornadas caracterizadas por la rutina aparecieron dolores que indicaban el final de una espera porque la pequeña Seinep Aguilar Lahera ya inquieta pedía descubrir su mundo externo.

El salón de partos de Cienfuegos estaba listo. Allí comenzó todo el trabajo de asistencia hasta que apareció algo inusual. Los médicos detectaron una malformación a nivel de la columna vertebral y decidieron el traslado al servicio de cirugía neonatal habilitado para casos muy complejos de recién nacidos de la región central.

Madre e hija llegaron al hospital pediátrico universitario José Luis Miranda, de Villa Clara. Recuerda el Dr. Miguel Ángel Cruz Díaz, especializado en la Neurocirugía, el gran reto que enfrentó, al año y siete meses de graduado, de acompañar al profesor Ángel Serafín Camacho Gómez, como guía principal del equipo, en este tipo de proceder con criaturas tan frágiles.

«Una herniación o defecto en el cierre de las estructuras óseas de la columna vertebral que clasifica dentro de un grupo de afecciones denominadas disrafismo espinal. Un término amplio con anomalías en ell tejido nervioso y la columna ósea», precisa el cirujano.

En dependencia del contenido herniado cambia el nombre y sería un lipomeningoradiculoce lumbosacro. Dicho de otro modo, un aumento de volumen que aparece dentro de la columna vertebral y al no cerrarse completamente durante la gestación sale, a manera de bolsa, entre las vértebras y se exterioriza con el incremento de volumen en la región lumbosacra

«El sitio de aparición puede variar y surgir en cualquier zona, incluso en el área craneal, cervical, y en la unión cráneo cervical».

MINUCIOSIDAD EN EL SALÓN

Una hora y media duró el acto quirúrgico en tiempo aproximado con un trabajo de suma paciencia que no admite la prisa y reclama el accionar de múltiples especialistas, incluso multiplicados de una misma rama. Aquí se suman neonatólogos, cardiólogos, imagenólogos, cirujanos generales, pediatras con rigor evaluativo.

«Esta malformación poseía un volumen bastante significativo para lo que estamos acostumbrados en Cuba y reclama una minuciosidad extrema porque de afectarse una de las estructuras el paciente puede quedar con defectos en la movilidad, en los esfínteres y provocar un daño permanente, sin descartar infecciones contempladas en el Programa de Atención Materno—Infantil (PAMI) e incluidas dentro de los protocolos de la cirugía neonatal. Por ello se establece la presencia de dos especialistas en anestesiología (en este caso los Dres. Florinda López de la Cruz y Rafael Pérez Álvarez) de suma importancia para nosotros, así como igual número de neurocirujanos y un equipo de enfermeros durante el proceso operatorio».

En el plano personal enfatiza en la tensión de intervenir a niños extremadamente inmaduros ya que al margen de las complejidades técnicas hay que estar al tanto de la anestesia, del detalle quirúrgico que evite la pérdida de gran cantidad de sangre a partir de estructuras muy pequeñas y de cualquier situación que pueda emanar de una agresión quirúrgica.

— Si hablamos de causas ¿cuáles serían las fundamentales en la aparición de estas irregularidades?

— La baja administración del ácido fólico durante la gestación por parte de las madres, unido al déficit de vitaminas, otros factores genéticos e infecciones.

De tres a seis meses antes de iniciar el embarazo debe aplicarse el ácido fólico, algo establecido en los programas de la atención primaria que muchas veces se incumple y reclama la responsabilidad de los padres al contribuir a la formación adecuada de las estructuras neurales.

El Dr. Cruz Díaz argumenta que la pequeña ha tenido buena evolución. Se cerró el defecto, y de no actuarse a tiempo pudo comprometer la vida o condicionar la invalidez de los miembros inferiores. 

DESDE LA NEONATOLOGÍA PEDIÁTRICA  

Pasar 24 horas en un servicio de Neonatología pediátrica ratifica el amor por la infancia y la decisión de entregarlo todo en tiempos muy complejos. Profesionales, técnicos y gente de bien que desconocen lo imposible aunque las tensiones traten de vencerlos, pero ahí están, y Yakelín Pérez Martínez, especialista en Medicina General Integral (MGI), neonatóloga y dedicada a la atención integral al niño, junto a   Dairy Pérez Guillén, diplomada de I grado en Neonatología, se refieren a las particularidades de Seinep.

Nació a término y con buen peso, unos 3750 gramos, equivalentes a 8, 1 libras, y desde el momento del nacimiento era visible la irregularidad en la columna vertebral.

«En nuestro centro se hicieron los estudios pertinentes y se confirmó el diagnóstico además de un lipoma en el sitio de la malformación, por lo que era inevitable la cirugía ante un defecto con significativas dimensiones para una niña pequeña».

Tanto Yakelín como Dairy recuerdan que este es el primer caso con dicha malformación registrado en el servicio durante el actual año; sin embargo, en 2020 aparecieron dos sucesos similares procedentes de otras provincias.

De no haberse operado a tiempo esa bolsa hubiera podido romper ante una piel muy fina en el sitio de la malformación y ocasionaría una cirugía de urgencia con complicaciones de sepsis del sistema nervioso central.

En la medida que pase el tiempo sin la debida atención puede crecer y crear una invalidez de los miembros inferiores e incluso con pronósticos muy reservados que llegarían a impedir los movimientos.

— ¿Si ustedes estuvieran en la piel de los neurocirujanos?

— Constituye un trabajo admirable, de esos que generan un estrés constante al resultar recién nacidos que demandan un tiempo de anestesia, una recuperación y seguimiento diario posterior, a la vez que si llegan a tener menos edad gestacional por parte de la madre y menor peso en las criaturas el cuadro se complejiza más y pone en tensión a todo el equipo.

— ¿Y esa mirada interior como neonatólogas?

— Es muy bueno saber que una niña malformada pudo atenderse, y que pasamos juntas con su mamá los momentos más difíciles. Por otra parte saber que gracias a un equipo se le pudo hacer la cirugía, que la pequeña está sometida a la lactancia materna con signos de buena diuresis, apropiado mecanismo de esfínter, y movimiento en sus piecitos.

La cama 6 del servicio de Neonatología del Pediátrico villaclareño ha quedado nuevamente vacía. Mileidy y Seinep están en casa. La primera agradecida de todos por salvar a su hija, y quizás la segunda dentro de algún tiempo retorne al hospital villaclareño para reciprocar con su beso a quienes la atendieron en gratitud por la vida.

RECUADROS

MEMORÁNDUM

— Esta afección es un tipo de espina bífida. En dependencia del lugar de ubicación involucra a raíces nerviosas, líquido cefaloraquídeo, y en otros casos hasta la medula espinal.

— Según bibliografía factores como la diabetes mellitus, la obesidad y el uso de medicamentos anticonvulsivos, por parte de la madre, también pudieran incrementar el riesgo de desarrollar este defecto.

— Anualmente nacen en el mundo 500.000 niños con irregularidades del tubo neural, representando la segunda causa de malformaciones, después de las cardiopatías congénitas, y la primera que ocasiona la muerte en menores de un año.

CONTRASTES

Centroamérica resulta un área frecuente del padecimiento. Baste decir que solo en Honduras estas anomalías representan el 44 % de los niños que nacen con malformaciones congénitas y es una de las problemáticas que conlleva a mayores repercusiones posteriores, según un trabajo publicado en la Revista Médica Hondureña.

La falta de atención durante el embarazo, la no inclusión de los fármacos necesarios, y el déficit monetario para llegar a exámenes prenatales conspiran en las gestantes, aunque vale aclarar que no siempre estas irregularidades se visualizan en las imágenes ultrasónicas.

¿Tenemos o no nuestras Razones?

PIE DE FOTOS

1.- Mileidy y Seinep ya están en casa, y antes de marcharse la mamá agradeció las atenciones brindadas a su hija.

2.- Parte de quienes se desempeñan en el servicio de Neonatología pediátrica y quienes asumen los casos de cirugía neonatal de alta complejidad.

3.- Sorprendidas las doctoras Yakelín Pérez Martínez (en primer plano) y Dairy Pérez Guillén valorando los detalles para proceder al egreso de Seinep.

4.- Las Dras Olga Lidia Fernández Fernández (a la izquierda) y Zenaida Jiménez Mondejar consultan las particularidades de una paciente.

5 y 6.- Diferentes planos del mielomeningocele lumbosacro, una afección producida por defecto en el cierre de la columna vertebral a nivel lumbar durante las primeras semanas del embarazo y se exterioriza a manera de bolsa.

También puede ver este material en:

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