Copa Mundial de Fútbol 2010 (Parte VIII, final)
La periodista Mayli Estévez Pérez finaliza este ciclo de trabajos en el que ofrece sus pronósticos de los grupos participantes en la Copa Mundial de Fútbol. Los goles están en el terreno, y dirán la última palabra.
¡Ole!
Por Mayli Estévez Pérez
Ha iniciado sus doce presentaciones mundialistas como «la roja» y por los intermedios, cuando todo apunta a la Copa, los ribetes “amarillos” de su camiseta empiezan a cubrir toda su trayectoria. Y el dorado final que describo no es porque se haya quedado con la de oro alguna vez, sino por arrimar su historia al significado de ese término en buen cubano. Hace 60 años de su mejor cara en citas mundialistas (cuarto puesto), y la selección española de este 2010 tiene cartas para imitar e incluso, cambiarle el final a esa historia. Es la mejor selección del mundo, la que más firme tiene su estilo y la que menos incertidumbre presenta con sus convocados. Para bien de los ibéricos, esa «furia roja» que chocaba contra todas las paredes del fracaso, sufrió una metamorfosis a lo largo del reinado del DT Luis Aragonés. Del fútbol agresivo que dejaba autopistas de errores para disfrute del contrario, pasaron a la roja del toque y del mayor control del balón. Con la redonda al pie y matando por arriba con su crack Fernando Torres, España se ha moldeado casi perfecta. Si tomamos esa base, la selección de la «Madre Patria» es la candidata a llevarse el grupo H sin el menor titubeo. Pero como las dudas son un elemento intrínseco en la psicología de este conjunto, todo puede suceder. Si otros llegan a Sudáfrica sin presión porque les quitaron la categoría de “favoritos”, la campeona europea llega con esa condición, y algo más: miedo a perder. Antes, cuando no estaban tan presionados, hicieron de la fase eliminatoria algo sencillo y la aprobaron con puntaciones perfectas. Se convirtieron en el segundo elenco más goleador de la clasificatoria -tras Inglaterra- con 28 tantos en diez partidos y entre los menos goleados, con tan solo cinco dianas recibidas. Eso fue hace varios meses, porque los amistosos de los últimos días no dejan nada claro. Le ha faltado ritmo y llegadas. Su línea defensiva fue un garabato, y de nuevo Iker Casillas se durmió entre los tres palos. Del Bosque ha sabido adaptar sus ideas al esquema con el que se encuentra más cómodo el equipo, pero sobre todo, falta “saber ganar un Mundial”. Pero este análisis, aunque tiene la vista un poquito más allá, por ahora solo resume la liguilla de grupos. El camino que pudiera tomar España se irá comentando a medida que pasemos hojas en este libro mundialista. En conclusión, el grupo de la «roja ibérica» parece accesible y no deben empezar a sufrir sino en octavos con el cruce mortal. La primera fase ha de ser un banco de pruebas, pero mientras eso sucede, le otorgo espacio a la otra roja del H. De la mano del técnico argentino, Marcelo “el loco” Bielsa, Chile parte de secundaria en el apartado H y aunque no es de las clásicas de Latinoamérica, también tiene madera para avanzar. La roja andina destaca por su capacidad ofensiva, y con Humberto «Chupete» Suazo al frente pone en aprietos a cualquier rival. Chile podría dar la grata sorpresa y el redentor de su fútbol, Bielsa, borrar su amarga experiencia del 2002 con la albiceleste. Los otros combinados que forman el cuarteto son los catrachos de Honduras, y los helvéticos de Suiza. La selección centroamericana cumple su segunda aparición histórica. Poseen buen físico, utilizan a fondo la velocidad de sus jugadores, pero la falta de concentración y la inexperiencia les cortarán las alas temprano. A los suizos, aunque con otras características de juego, puede sucederles lo mismo. Tienen un conjunto versátil entre veteranía y juventud, buena defensa, pero no llegan al nivel de las otras selecciones europeas, aunque tengan como DT a Ottmar Hitzfeld. Tras este análisis, y con el apoyo de la estadística, España reservó pasaje de primera (nunca ha perdido un partido contra sus rivales de grupo) y la roja andina de segunda. Dentro de seis días comenzarán a trastocarse pronósticos, entre favoritos vencidos y «descartados» que dan la sorpresa. Reserve su sitio frente a la pantalla y un lugar en estas páginas, porque el Mundial ya siente en la nuca el pitazo inicial.
0 comentarios